Luego del partido el Departamento de Prensa de la LFPC dialogó con el Ingeniero Civil, oriundo de Hasenkamp, para conocer sus sensaciones de arbitrar la final. También conocimos cómo se preparó para la final, su trayectoria, sus inicios, su mirada sobre la actualidad de nuestra Liga, y además brindó un mensaje para los aspirantes a ser árbitros y árbitras.
La final: “La viví con mucha intensidad y con la responsabilidad que se merece. Entendiendo todo lo que está en juego en una final, ya que en cualquier decisión de uno está el destino del trabajo de todo un equipo, de una institución. El árbitro lo entiende, entonces uno se prepara con la idea de no equivocarse. Siempre digo que nos podemos equivocar, porque es algo humano, entonces la preparación del árbitro tiene que ser para disminuir el margen de error. No es la primera vez que dirigí una final, tengo muchas, pero todas son distintas. El partido lo viví con una intensidad diferente a lo que es un partido normal por todo lo que está en juego, pero con la tranquilidad que uno está preparado y además cuento con la experiencia de estar en otras finales”.
¿Cómo te preparaste para la final? “Me avisaron el día martes. Como no estuve designado por AFA, la Liga me designó para la final, así que ahí comenzó la preparación. Si bien conocía a Litoral, porque lo dirigí en este campeonato, y Arsenal lo conozco, la preparación fue durante toda la semana. Uno empieza a averiguar sobre los jugadores, ver videos, hablar con los árbitros para interiorizarse más. Así como los equipos se estudian entre sí, el árbitro estudia a los equipos que va a dirigir. Ese estudio previo te ahorra trabajo y te ayuda en la ubicación dentro de la cancha, para saber si hay jugadores conflictivos, los que protestan, si la defensa juega adelantada o con gente en el fondo, etc, todo eso se estudia y te ayuda a que el partido sea más sencillo”
El trabajo con la cuaterna arbitral: “El trabajo con los muchachos fue muy bueno. Les expliqué la manera con la que me gusta trabajar, lo que quiero que haga cada uno en su lugar que le corresponde y creo que el trabajo grupal fue muy bueno y quedé muy conforme con el trabajo de la cuaterna”
Trayectoria: “Hice el curso de árbitro en Paraná Campaña, en 2008 o 2009. Arranque siendo cuarto árbitro y cobrando partidos de Sub-16. Luego en el año 2010 me voy a estudiar a Paraná, ingeniería civil, y entendiendo que debía buscar un sustento económico, porque la realidad era que mi familia no iba a poder solventarme los estudios por completo, tenía que buscar un trabajo que me permitiera estudiar, y como la carrera demandaba muchas horas de estudio, el arbitraje cumplió con todos los requisitos que necesitaba, además que me gustaba. En 2014 hice el curso de árbitro nacional, con la posibilidad que me dio la Liga de Victoria, donde arranque dirigiendo Sub-16 y fue ascendiendo hasta primera y comencé a dirigir en 2015 en los torneos de ascensos. Dirigí muchos partidos, también una de las cosas buenas que tiene el arbitraje es conocer muchos lugares. Conocí la provincial por completo”.
Teniendo en cuenta tú trayectoria, donde conociste otras Ligas ¿Cómo ves a nuestra Liga? “Paraná Campaña es una de las ligas que más gente convoca, engloba muchos pueblos lo que hace que los equipos quieran mejorar día a día. Si bien hay otras ligas que tienen la misma cantidad de equipos, sus clubes no tienen estadios propios, juegan de local en cancha de otro equipo, eso en Paraná Campaña no pasa. Las categorías inferiores han mejorado notablemente en los últimos años. Los equipos se preocupan pos sus inferiores y eso se ve. Se mantiene un orden de campeonato. Al estar cerca de Paraná muchos jugadores que hacen diferencia terminan jugando en Paraná Campaña. La extensión que tiene Paraná Campaña también hace que sea mejor que otras ligas. Si bien hay mucho que mejorar, si uno hace un global con todos los clubes, todos tienen medianamente buenas instalaciones y eso en otras ligas no pasa. En otras ligas hay marcadas diferencia entre clubes. También la luz artificial está en todas las canchas y en otras ligas son contados los clubes que tienen. Todas esas pequeñas cosas cuando las metes en la balanza te hacen entender que Paraná Campaña es una de las mejores Liga de la provincia”.
Comenzaste en Paraná Campaña, te fuiste para crecer y este año volviste ¿Con qué Liga te encontraste? “Me encontré con una Liga totalmente distinta. Cuando yo me fui a Paraná, también fue porque vi que no tenía futuro en Paraná Campaña. Nunca nos capacitaron, no había nada, no teníamos preparación, no teníamos respaldo de nadie. Ahora veo que se trabaja institucionalmente con el arbitraje, se está respaldando al árbitro, que los hechos de violencia no quedan impunes eso me da ganas de colaborar con la Liga. Pero la realidad arbitral es totalmente distinta cuando yo empecé. Por ejemplo la inclusión de la mujer como árbitro es un cambio rotundo. Además de la calidad de instructores que hay, como Fonzo y Altamirano instruidos en AFA. Todo eso te hace ver que la Liga busca un cambio”.
En nuestra Liga se está dictando el curso para aspirantes a árbitros y árbitras ¿Qué le podes decir a nuestros estudiantes? “Es un caso especial en el mundo. Es algo que te gusta o no te gusta, no hay grises. Muchas veces me han planteado que sirve como un sustento económico, pero hay miles de otros sustentos y menos riesgosos que el arbitraje. El árbitro tiene que aguantar y soportar un montón de cosas que en otras actividades no hay que hacerlo. En el arbitraje tenés que estar dispuesto a hacer cambio en tú vida, que no todos están dispuestos a hacerlo. Uno tiene que ser consiente que se pierde los fines de sema con su familia, cumpleaños de los padres, hermanos, amigos, festejar día del padre o día de la madre. También hay que aceptar que los partidos no terminan bien, por errores propios o no, hay que aceptar todo eso y de lo contrario no se puede ser árbitro. El consejo que puedo dar: el que esté dispuesto hacer el sacrificio que le meta con todo, porque el premio y las satisfacciones son muy grandes”.